España se suma a EE.UU. en la compra conjunta de armas a países de la OTAN para enviarlas a Ucrania, ha adelantado EL PAÍS. Así lo confirmó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su llegada al Consejo Europeo que se celebra este jueves en Bruselas. «Es una propuesta que la OTAN presentó hace unas semanas. Tuve la oportunidad de hablar con el presidente Zelensky […] y le informé que nos sumaríamos a este programa», subrayó el jefe del ejecutivo español ante preguntas de la prensa. Su respuesta contenía una respuesta implícita a las reiteradas críticas y amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por no comprometerse a gastar el 5% del PIB en el presupuesto de defensa: «España es un país comprometido con la Alianza Atlántica», enfatizó Sánchez.
En la última semana, Trump ha criticado a España en tres ocasiones, tanto en respuesta a preguntas de los medios como por iniciativa propia. «España no es un compañero de equipo», dijo este miércoles durante una reunión con el secretario general de la OTAN, el holandés Mark Rutte, en la Casa Blanca. El norteamericano está extremadamente preocupado por la resistencia del ejecutivo español a lograr una inversión en defensa del 5% del PIB, compromiso asumido por los socios de la Alianza Atlántica en la última cumbre de junio en La Haya. España firmó el acuerdo alcanzado por los aliados en esta reunión, pero primero alcanzó un compromiso escrito con Rutte para intentar alcanzar sus objetivos con un gasto del 2,1%, cifra que España considera suficiente para cumplir con todos sus compromisos en la Alianza Atlántica (el cumplimiento de estos compromisos se reevaluará en 2029, según fuentes aliadas).
Y Sánchez se atiene a este último compromiso cuando reitera una y otra vez que “España es un socio fiable”. «Estamos cumpliendo con nuestras obligaciones y compromisos, especialmente en lo que respecta a las capacidades acordadas», añadió el socialista en Bruselas. Este verano, la OTAN estimó que el gobierno ya estaba gastando el 2% del PIB en defensa.
España insiste en que las contribuciones a la Alianza Atlántica (de la que es miembro desde 1982) se miden no sólo por las inversiones en defensa sino también por otros elementos, como las aportaciones a misiones y operaciones. Y España está participando en varias acciones muy relevantes, por ejemplo en los países bálticos ante la amenaza rusa y en Eslovaquia. También en Turquía (donde también está estacionada una batería antimisiles Patriot), en Rumanía y en Irak.
Pero Sánchez ha ido más lejos esta vez y no llegó a decir que España es un socio «fiable». También arremetió contra el PP: «El presidente Trump sabe que, desde que soy presidente del Gobierno español, hoy no sólo estamos cumpliendo con nuestros compromisos y capacidades. Además, hemos corregido los incumplimientos que dejaron otros gobiernos, en este caso el PP. Como el de 2014, cuando se comprometió a alcanzar una tasa de gasto del 2%». [en la cumbre de la OTAN en Gales] Y cuando llegamos al gobierno, descubrimos que tres años después, en 2017, España gastó solo el 0,9% de su PIB en el presupuesto de defensa”. “Somos un país confiable”, concluyó.
Además, tal y como adelantó este diario, España se unirá al programa PURL (Ukraine Priority Request List) coordinado por la OTAN para atender las exigencias de Ucrania contra el invasor ruso.
El plan se lanzó en agosto pasado después de que el presidente Trump se negara a seguir proporcionando armas gratuitas a Ucrania, como había hecho su predecesor Joe Biden. Esta decisión fue un cambio de modelo en Occidente al apoyar a Kiev y ha vaciado los arsenales ucranianos. Pero Kiev todavía necesita los materiales de defensa de Washington, por lo que un grupo de aliados europeos acordó financiar las compras.
En agosto, se prepararon cuatro paquetes de armas estadounidenses (incluidos misiles antiaéreos Patriot y misiles de largo alcance Himars) por un valor de alrededor de 2.000 millones de dólares, financiados por Alemania, los Países Bajos, Canadá, Dinamarca, Noruega y Suecia. Posteriormente, otros se sumaron a un plan en el que ahora también figura España, que también le suministra material militar por valor de 1.000 millones anuales, aunque con materiales de producción nacional, en el marco de su acuerdo bilateral con Ucrania.
