El expresidente catalán Jordi Pujol, de 93 años, compareció públicamente en las horas previas al inicio oficial de la campaña electoral catalana para resaltar que votará por Carles Puigdemont el 12 de mayo. Pujol se dejó ver este miércoles en un acto en Martorell (Barcelona) y anunció su apoyo a la candidatura de Junts que lidera Carles Puigdemont: «Votaré a Junts, votaré a Junts sin duda, ahora es el momento de Junts y yo». Votaré por Puigdemont”, afirmó. Ha desvelado que, en su opinión, la propuesta liderada por Puigdemont es el proyecto «más cercano a lo que era Convergència».
En un vídeo publicado por Digital El Nacional, Pujol aparece ante un atril y anuncia una declaración de intenciones, que lee directamente en un papel. Con gafas y voz firme, Pujol muestra sus preferencias por la candidatura de Puigdemont, que abandonó España en 2017 para evitar ser condenado por su participación en el referéndum ilegal del 1-O de 2017.
Este jueves, Puigdemont inicia su campaña electoral en Argelers (sur de Francia). El partido ha anunciado que todos los mítines ofrecidos por Puigdemont se desarrollarán en territorio francés. En un mensaje en la red social X, Puigdemont anunció la intervención de Pujol en Martorell. “Muchas gracias, presidente Pujol. «Recuerdo su primer mitin en Girona en las primeras elecciones generales de 1980. Todavía no podía votar, pero quedé impresionado por la fuerza y la determinación para reconstruir Cataluña después de la larga noche del franquismo», dijo Puigdemont.
Después de que Pujol fuera vilipendiado públicamente por su confesión de evadir dinero en Andorra, experimentó una especie de rehabilitación pública. Una parte de Junts, grupo con arraigo en Convergència, reivindica y defiende la labor de gobierno de Pujol. Incluso Salvador Illa, candidato del PSC, ha citado a Pujol en sus discursos, elogiando el impulso que dio a la transformación social y económica de Cataluña.
Jordi Pujol presidió la Generalitat durante casi dos décadas y fue líder de Convergència Democràtica, el partido que unió al nacionalismo catalán conservador. Con el tiempo, la marca Convergència se vio gravemente minada por los vínculos del partido con varios casos de corrupción y la formación mutó en nuevas formaciones como PDeCAT, PNC o Junts per Catalunya.
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