
Los mensajes racistas de un consultor de Vox adscrito a las Cortes de Aragón desembocaron finalmente en una negociación sobre el presupuesto autonómico. El gobierno del PP aragonés de Jorge Azcón necesita el consentimiento de los Ultras para tramitar los proyectos de ley del próximo año. Sin embargo, este martes se sumó un nuevo obstáculo al rechazo previo a la formación de Santiago Abascal, que dificulta aún más el proceso. Un obstáculo que nada tiene que ver con requisitos sobre el contenido de los bienes. Ésta es la secuencia de acontecimientos que ha hecho estallar cualquier posible entendimiento.
La telenovela empezó hace unas horas. Este lunes, el digital periódico socialista Trascendió la noticia de que Marcos Francoy, asesor parlamentario de Vox en las Cortes de Aragón, había distribuido desde su cuenta personal en la red social X varias publicaciones con referencias nazis y mensajes abiertamente racistas. A partir de la información, el presidente de Aragón pidió este martes al grupo ultraparlamentario el cese del asesor. De lo contrario, amenazó con romper las conversaciones con los ultras, con quienes gobernó en coalición hasta el año pasado, cuando Vox abandonó repentinamente a los cinco líderes regionales que compartía con el PP.
«Este señor debe abandonar las Cortes de Aragón inmediatamente, no hay alternativa. Los aragoneses no estamos preparados para hacer este tipo de declaraciones», ha afirmado Azcón esta mañana en una rueda de prensa celebrada junto al vicesecretario del PP Elías Bendodo. «O sale de las Cortes de Aragón o ya no hablaremos con la gente de Vox. No llamaré al portavoz de Vox mientras este señor siga en el grupo», añadió el barón popular.
Las palabras de Azcón enfadaron a los diputados aragoneses de Vox, que reaccionaron airadamente por la tarde. Sobre las 18.00 horas, el partido de extrema derecha emitió un comunicado asegurando que no hablaría con el PP sobre el proyecto de ley autonómico. «El grupo Vox no se reunirá para negociar un acuerdo presupuestario con el Gobierno de Aragón del Partido Popular para 2026», subraya el partido en el comunicado distribuido a los medios. “El Partido Popular tendrá que negociar con cualquiera que esté dispuesto a aceptar planes oportunistas y mezquinos”, añaden.
Lo insólito del choque es que, según fuentes del partido, Vox ya había decidido despedir al asesor. Pero aunque han actuado como les pedía el PP, los ultras no ven positivamente la amenaza de Azcón por la mañana. De ahí la anunciada ruptura con el Partido Popular. «La semana pasada, Vox ya se puso en contacto con el organismo competente para iniciar los trámites y pasos preparatorios imprescindibles si se decide renunciar a los servicios de Marcos Francoy como asesor del grupo parlamentario en las Cortes de Aragón», señala el comunicado. «El motivo de este despido es la pérdida de confianza en el asesor. Circunstancia que se ha agravado aún más en los últimos meses», añaden.
El galimatías por parte del asesor continuó minutos después. Pues bien, el PP respondió al comunicado de Vox con otro comunicado en el que demuestran que no entienden al movimiento cuando finalmente despidieron a Francoy. «El Partido Popular de Aragón lamenta que el grupo parlamentario de Vox en las Cortes regionales reaccione de forma irreflexiva e impulsiva ante un tema trascendente como es la negociación del presupuesto de la Comunidad Autónoma», señalan los Partidos Populares. “En particular, resulta cuanto menos preocupante que anuncien su rechazo a una posible negociación poco después de destituir al asesor que difundió mensajes fascistas y racistas en las redes, que es la condición sine qua non que requiere el Partido Popular de Aragón para poder mantener conversaciones institucionales”, añaden en el gabinete de Azcón.
Empuje electoral
El Partido Popular se apoya en la extrema derecha de Extremadura y Aragón para aprobar sus presupuestos, mientras que los dos ayuntamientos aún tienen que cerrar sus cuentas. Pero los ultras han crecido y están dispuestos a ahogar bajo sus mandatos a sus respectivos presidentes María Guardiola y Azcón. Aunque oponerse a su adopción significa convocar elecciones anticipadas. “Estamos preparados para ser los malos e ir a elecciones”, decían hace unos días altas fuentes de Vox.
En Extremadura, Guardiola hace campaña actualmente por la voz de los ultras, con los que, según fuentes cercanas, hasta ahora ha mantenido contactos en vano. Los obstáculos llevaron a la líder popular a anunciar días atrás que convocaría elecciones anticipadas si no se alcanzaba un pacto de cuentas en la asamblea regional. En el caso de Aragón, Azcón no lanzó un aviso de este calibre. Y ahora mismo está condicionando sus presupuestos a la condición de que el Tesoro fije la senda del déficit en un consejo de política económica y financiera con los ayuntamientos, que no tiene fecha. La confusión con el asesor de Vox de este martes pone aún más obstáculos al ejecutivo aragonés.
