Advertisement
“Barcelona no quiere ser una ciudad turística, sino una ciudad con turismo”. Así se expresó el miércoles por la tarde Mateu Hernández, director general de Turismo de Barcelona, en una declaración de intenciones dirigida a un grupo de periodistas extranjeros. . Hernández admitió que el objetivo de Barcelona no es aumentar el número de turistas, sino defender una actividad amable y que no genere problemas a los vecinos.
Hernández hizo estas declaraciones en una cena con expertos en información que participan en un viaje de prensa organizado por el consorcio público-privado. El objetivo de esta jornada es mostrar al grupo de periodistas -especialmente de publicaciones especializadas en arquitectura- el cambio urbanístico al que se enfrenta la ciudad. De miércoles a viernes, los invitados explorarán en detalle la profunda transformación que afronta La Rambla, así como el nuevo Port Olímpic y la oportunidad que representa la Copa América. El viernes, último día del viaje, se mostrará la transformación de la plaza de les Glòries.
Tras su estancia en el Hotel 1898 de la Rambla el pasado miércoles, el expresidente de Amics de la Rambla, Fermí Villar, explicó la historia, la renovación y las oportunidades que ofrece esta vía tan turística. Por la tarde, Lola Domènech, arquitecta responsable de la renovación del paseo marítimo, desveló a los visitantes un secreto que los barceloneses ya conocen: “Los turistas caminan por la Rambla, mientras que los vecinos sólo la cruzan para ir del Gòtic al Raval o viceversa. Domènech ha advertido de la necesidad de «recuperar el alma» y ha advertido que para ello es necesario «transformar social y económicamente un paseo donde existe un monocultivo del comercio dedicado al turismo».
Advertisement
Tanto Domènech como Hernández –al igual que Pau Bosch, actual presidente de Amics de la Rambla– coincidieron en que hay que recuperar “el alma” de la Rambla, y el arquitecto advirtió que el principal problema de la falta de espíritu del paseo es la “gentrificación”. ser. . “De momento no hay ningún sitio en la Rambla donde puedas estar sin pagar. Sólo hay terrazas y necesitamos crear espacios para que la gente se siente y se divierta gratis”, enfatizó el arquitecto. El director de Turismo de Barcelona recordó que fueron necesarios tres alcaldes -Xavier Trias, Ada Colau y Jaume Collboni- para que la reforma del paseo marítimo estuviera en marcha. Hernández advierte también de la necesidad de afrontar el gran reto de hacer la ciudad atractiva para los turistas manteniendo la identidad y el respeto social y económico a los vecinos.
Este jueves los periodistas internacionales seguirán recorriendo la Rambla. Turismo de Barcelona tiene preparadas para ellos la visita al Mirador de Colón y la presentación del proyecto, que incluye incluso la colocación de quioscos y terrazas. Doménech aboga por que los quioscos ofrezcan también una actividad cultural relacionada con la venta de entradas a las distintas zonas del paseo marítimo. Los periodistas visitarán también el Gran Teatre del Liceu. Por la tarde el recorrido continúa por Port Olímpic, donde Olga Cerezo, directora del puerto, presentará las mejoras en esta zona costera. Los participantes también darán un paseo en las tradicionales Golondrinas y visitarán la Barcelona America’s Cup Experience en IMAX. El viernes toca explorar la transformación de la plaza de les Glòries y las iniciativas para transformar esta zona en un nuevo centro urbano.
Puedes seguir a EL PAÍS Cataluña Facebook Y Xo regístrate aquí para recibirlo Nuestro boletín semanal
Lo que más influye es lo que sucede después. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscribirse a